Con este tratamiento de Peeling + PRP (infiltraciones de plasma rico en plaquetas) se consigue un efecto rejuvenecedor en rostro, cuello y escote.
Se aproximan fechas en las que nos gusta lucir mejor aspecto que nunca: la Navidad. Pero las temperaturas bajas pueden perjudicar bastante la piel del rostro, provocando sequedad y otorgando un aspecto más envejecido y apagado. La Doctora Lorena, que está al frente de nuestro nuevo servicio de Medicina Estética, recomienda someterse a algún tratamiento facial antes de las fechas navideñas.
La doctora Lorena aconseja la combinación de peeling con el protocolo de bioestimulación con Plasma Rico en Plaquetas (PRP). Con este tratamiento conseguimos un efecto rejuvenecedor no solo en la piel del rostro, sino también en la epidermis de cuello y escote, zonas igualmente importantes que a menudo quedan olvidadas.
Peeling facial
En primer lugar, y como preparación para las fiestas, la Doctora Lorena recomienda el peeling, ya que es un tratamiento que mejora la apariencia de la piel de manera general. Además, “gracias al peeling, renovamos la piel y esta recibirá de manera mucho más eficaz el siguiente tratamiento”. El peeling facial es un tratamiento previo muy importante que conviene no saltarse.
Este protocolo consiste en la aplicación de un conjunto de sustancias y ácidos combinados sobre la epidermis de la cara. La combinación actúa regenerando las células y atenuando progresivamente las manchas melánicas de la piel.
Infiltraciones de plasma rico en plaquetas
Para devolver la firmeza de la piel del rostro antes de las fiestas, la Doctora Lorena propone el tratamiento de bioestimulación con factores de crecimiento con Plasma Rico en Plaquetas (PRP). Con ello se provoca que las células madre de la epidermis se desarrollen en células de tejido conectivo, incrementando así el número de estas células que hay en la piel y recuperando el nivel de colágeno y elastina. El resultado es una piel renovada, elástica, rejuvenecida. Las arrugas, líneas de expresión e imperfecciones quedan atenuadas.
Los resultados ya son visibles después de la primera sesión y el la Doctora Lorena recomienda, generalmente, someterse a tres sesiones al año. La única prescripción es evitar la exposición solar al menos los tres días posteriores al tratamiento, por lo que el invierno es la estación ideal para someterse a infiltraciones de PRP.
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